FRAGILIDAD, ¿TU NOMBRE ES MUJER?

María Míguez Literatura



No,

no soy tuya,
no te pertenezco.

Mi frágil vestido

te ha confundido

esta vez.

¡Cómo podías saber

que había sido forjada

en la fragua de Hefesto!


Texto e ilustración de María Míguez

28 comentarios en “FRAGILIDAD, ¿TU NOMBRE ES MUJER?”

  5. ¡Cuán certero y grande es tu arte, María! ¡Felicitaciones por tus formas de expresión!
    Es verdad, no somos frágiles. Pero, a pesar de lo maravillosa que son hoy las comunicaciones, y que gracias a ellas muchas podamos estar sintonizadas en torno a una misma idea, aún habrá otras tantas viviendo diferentes realidades, habrán de postergarse una y otra vez, aunque ello implique someterse. No debiera ser, pero es una realidad. Felizmente, las sociedades y sus individuos crecen, maduran, superan sus limitaciones, logran mejores niveles de educación, que harán posible que un día no tengamos necesidad de conmemorar un «día de».
    Todos tenemos derecho a ser respetados y a vivir en paz, independiente del género al que pertenezcamos.
    ¡No, a ningún tipo de violencia!
    Un abrazo

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    • Querida Awilda, gracias por pasarte siempre por mi mundo y siempre con palabras que animan a seguir trabajando para mejorar. Efectivamente el tema es una triste y negra realidad que se prolonga demasiado en el tiempo. Lacra social donde las haya. Pero no perdamos la esperanza porque en nuestra mano está educar a nuestros hijos para conseguir una sociedad más sana.
      Muchísimas gracias de nuevo y que tengas un día excelente.
      Un fuerte abrazo

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    • Qué amable! Muchas gracias, María. Efectivamente es un tema candente, delicado y difícil al mismo tiempo, aunque en el fondo lo que tendríamos que erradicar de una vez por todas es la violencia en cualquiera de sus manifestaciones.
      Un abrazo y que disfrutes del fin de semana, que ya queda menos.

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  10. Flexible y fuerte como un junco,
    que se yergue ante el viento
    que le balancea de un lado a otro
    pero no consigue quebrarle…

    Las mujeres somos fuertes y nos lo tenemos que creer, todas sin excepción. No pueden conseguir que nos sintamos vencidas ante los hombres. Pero algunas se sienten tan anuladas que han olvidado su fortaleza y hay que luchar porque no haya ninguna que se deje amedrentar.
    Me ha encantado el poema y la ilustración es preciosa. Gracias
    Un abrazo.

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